Todo sobre la ruta GR-11, que cruza los Pirineos

La Senda Pirenaica recorre esta cordillera, una frontera natural desde el cabo de Creus y hasta el de Higuer. 800 kilómetros llenos de historia, tradiciones y pueblos donde poder pasar una noche gracias a sus albergues o refugios. 

A través de esta ruta, con 46 etapas, podremos recorrer País Vasco, Navarra, Aragón y Cataluña por valles y collados, aunque es en la zona aragonesa donde sí se aconseja contar con conocimientos de montaña, especialmente en el invierno. Es posible desviarnos por otras rutas o picos (como el GR-10 francés).

Dónde dormir en el GR-11

Cabe destacar que la mayoría de las 46 rutas finaliza en poblaciones o refugios, por lo que es fácil organizarse. No obstante, recomendamos informarse con anterioridad sobre los alojamientos, puesto que algunos de ellos están en zonas inhabitadas. 

Flora y fauna en esta ruta por los Pirineos

Hablar de la GR-11 es nombrar a 4500 especies, 160 endémicas. Entre ellas, las más exóticas pueden ser la coronilla del rey o la aquilegia. Entre los árboles, el pino negro o el silvestre, además del abeto común, son los que más encontraremos. En la parte más occidental, contemplaremos valles y prados verdes; en la parte central, incluso podremos disfrutar de zonas más secas, con montes de hayas verdes o garrigas y, en la mayor parte del camino, especialmente en Aragón, veremos el icono del Pirineo: la flor de nieve. 

Consejos para realizar la ruta de los Pirineos

No es necesario ser deportista de alto nivel, pero sí es aconsejable tener preparación física y experiencia en rutaspor alta montaña. Al no existir caminos llanos, podremos realizar apenas 15 kilómetros en 7 horas, por lo que es importante descansar e hidratarnos bien para evitar que el cansancio acumulado nos juegue malas pasadas. 

Debemos ser conscientes de nuestras limitaciones, también de las del grupo o acompañantes. Además, debemos elegir la época perfecta para realizar la ruta: en el verano, con temperaturas suaves o incluso calor o, por contra, en invierno, con nieve. Tendremos que consultar mapas o guías para que todo salga a la perfección. Por último, podemos destinar un día a la semana a descansar, sin realizar rutas, únicamente para conocer localidades.

Los enamorados de los Pirineos y el senderismo tienen en la GR-11 una de las rutas más sentimentales que existen. Bonitos paisajes, recorrerse toda la cordillera de este a oeste y su rica flora y fauna son sus principales atractivos.